Museo Casa de Areny-Plandolit

Dentro de la oferta cultural de Andorra podemos encontrar una amplia variedad de lugares con encanto. Por ejemplo, los museos en Ordino son una muestra de la vida en este rincón de los Pirineos.

Museo Casa de Areny-Plandolit

El Museo Casa de Areny-Plandolit, situado en la calle Mayor de Ordino, es uno de los más emblemáticos de Ordino y de Andorra y nos muestra cómo era una casona de una familia adinerada del siglo XIX.

Aunque la construcción del edificio data del s. XVII, fue reformado completamente en el s. XIX, cuando la familia Areny-Plandolit vivía su época de mayor esplendor económico, en los tiempos de don Guillem d’Areny-Plandolit, tercer barón de Senaller y Gramenet.

Museo Casa de Areny-Plandolit, en Ordino

Don Guillem fue síndico general de los valles andorranos, promotor de la reforma de 1866 y una de las figuras más destacadas en la historia del principado. Su fortuna se debe a su actividad en la industria del hierro en Andorra y en las fraguas donde se trabajaba el metal.

De esta época de mediados del siglo XIX datan algunas de las mejores estancias de la casa, como la sala nobiliaria, los comedores, la sala de música, las bodegas, la biblioteca o la capilla. Igualmente, las defensas que se construyeron distinguen esta casa de la del común de los ciudadanos andorranos.

Habitada hasta mediados del siglo XX, en 1972 fue comprada por el Gobierno de Andorra con la intención de convertirla en museo. Tras una amplia reforma, el museo fue abierto al público en 1985.

La casa, utilizada como lugar de veraneo de esta pudiente familia, está decorada y ambientada tal y como lo estaba en aquella época, con mueblos lujosos y no pocos objetos de valor.

Museo Casa de Areny-Plandolit, en Ordino

La distribución se realiza en tres plantas, siendo la planta baja en la que se encuentran la bodega de aceite y leña. En la primera planta se disponen el comedor, los dormitorios, la cocina, la biblioteca y la capilla, junto a la sala de armas y una sala de baile.

Algunas de las salas de la casa nos dan una visión de las aficiones de sus habitantes, como la sala de fotografía, la de medicina, la de los juguetes o la sala de armas, lo que también nos da idea del nivel económico que debían tener sus propietarios.

En los jardines, donde anteriormente se ubicaba un museo de animales y lugar de paseo durante la visita, se encuentra el Auditorio Nacional de Andorra.

El precio de la entrada es de 3 euros (1,50 para mayores de 65 y estudiantes). Entrada gratuita el primer domingo de cada mes. La visita a esta casa-museo dura alrededor de una hora.

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